Por una parte se trata de todo un desafío, probablemente no muchos alumnos en este nivel se han enfrentado antes alguna vez a un examen de esta características, aunque se trata de una situación muy parecida a la de un concurso como el que celebramos hace unos días, o incluso una audición de las que hacemos cada trimestre.
Hemos hablado ya de lo importante que es evitar convertir todas estas ocasiones en 'exámenes internos', mi sugerencia es que en casa se vean siempre como un logro, el de afrontar con buen ánimo el encuentro con el público (o el tribunal) e intentar obtener el mejor provecho de ello. Justo después de estos exámenes no aporta gran cosa juzgar el resultado, pues no es tanto el fruto de ese momento en particular sino de todo un proceso de trabajo que, al menos, abarca varios meses.
Con la idea de conseguir ese espíritu y de buscar que se den las mejores circunstancias posibles en estos casos, he preparado una breve lista de consejos que creo que pueden funcionar bien:
- Evitar juicios inmediatos tras el examen; haya salido como haya salido hay que celebrar que se ha afrontado la situación y premiar el esfuerzo. Un juicio posterior puede corresponder al profesor (días después) y en casa se puede hacer balance de todo el curso pasados unos días.
- Crear un clima de apoyo y ánimo en todo caso, ya es tarde para negociaciones o advertencias que sólo servirían para convertir el examen en algo traumático. Si deseamos que sea una experiencia positiva y que el niño rinda a su mejor nivel, lo más práctico es darle confianza y dejar claro que el resultado no condiciona nuestro afecto.
- Intentar que ese día sea una jornada normal, sin sobrecargas de trabajo pero evitando también que todo el día gire en torno a la prueba. Eso sí, tras el examen, una merienda o una cena especiales y un poco de descanso como premio.
- Dormir bien el día anterior es fundamental, posiblemente el día previo al examen es conveniente descargar un poco de tareas al niño.
- Tener toda la información con antelación de dónde, cuándo, cómo se celebrará el examen, qué materiales hacen falta... en este enlace se accede a la información actualizada que facilita el conservatorio.
- Preparar las tres fotocopias de las piezas que se presentan con tiempo. A esas piezas puede añadírseles una portada sencilla en la que figure al menos la siguiente información: Prueba de acceso a enseñanzas profesionales, curso lectivo, nombre del alumno, programa que se presenta (nombre de la pieza o estudio y compositor) indicando qué va de memoria. También se puede añadir la especialidad, lugar, u otra información que deseemos.
- Tener preparadas las partituras que se van a utilizar en la prueba, incluida la/s que van de memoria, en el orden en que se desea tocar (por si nos dan a elegir), debidamente pegadas con celofán si son varias. Evitad cambiar de partituras justo antes de la prueba, es preferible llevar las que se han trabajado durante el curso.
- Llegar cinco o diez minutos antes de la hora a la que esté citado. Llegar con el tiempo justo añade estrés innecesariamente y llegar demasiado pronto también.
- Y ante todo, restar dramatismo, se trata de un momento importante en su justa medida, si alrededor existe un ambiente de tranquilidad y mesura ayudaremos a que los niños compensen sus nervios.
Mucha suerte y éxito a todos.
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